Monumento a la Mujer Marinera
Seguramente a muchos de los que conocen Lloret de Mar; no les importaría lo más mínimo cambiarse por la Mujer Marinera durante unos instantes. Desde este lugar privilegiado, las vistas sobre Lloret de Mar; muestran un impresionante paisaje característico de una zona mediterránea que tiene más que merecidas todas y cada una de sus visitas con sus consiguientes halagos.
Viajar a Lloret de Mar supone hacer una visita obligatoria a este monumento que se ha convertido en un emblema para una ciudad relacionada con el mar de principio a fin; la historia del lugar está completamente ligada al Mar Mediterráneo y la Dona Marinera no podía ser menos; su significado, su tradición, e incluso su propio nombre están inseparablemente ligados con el punto hacia donde mira; el océano cristalino que baña el Levante Español.
Significado e historia de la Mujer Marinera
Desde su encargo en el año 1966; muchos son los que han visitado este monumento y han podido contemplar toda la bahía de Lloret desde el acantilado en el que se sitúa; mientras tocaban con su mano el pie derecho de la Dona Marinera, y es que según cuenta la tradicional leyenda en torno a la estatua; quien lo hace mirando al horizonte y pide un deseo lo ve cumplido. Realidad o ficción, no deja de ser una brillante historia que no hace más que otorgar más magia a la localidad; seguro que le pica la curiosidad por comprobarlo.
La también conocida como la Venus de Lloret; está hecha de bronce por Ernest Maragall y mide aproximadamente 2,4 metros; un gran monumento dedicado a un gran colectivo: las mujeres marineras que se quedaban en tierra a cargo de sus familias; mientras sus maridos viajaban a América para buscar sustento; por este motivo la estatua se alza sobre las orillas del Mediterráneo con un gesto de despedida o recibimiento. Ésta es una más de todas las muestras que certifican la estrecha relación del municipio gerundense con su enorme tradición marítima.
Ubicación del monumento a la Dona Marinera
Una de las cosas que más impresiona de esta obra es que si ya de por sí es espectacular y tiene un profundo significado; su situación, su entorno y el recorrido que hay que hacer para llegar hasta ella no tienen prácticamente nada que envidiarle. La Venus de Lloret está ubicada en el trayecto de una vía que también es histórica en la comarca de La Selva; conocido como el Camino de Ronda y que recorre las orillas de todas las playas del litoral lloretense formando parte de grandes rutas de senderismo.
Este recorrido tiene una historia de peso que se remonta al siglo XIX; cuando fue habilitado como un sendero que recorría parte de la costa catalana, entre acantilados y zonas boscosas, con la finalidad de controlar el contrabando que llegaba a través de esta frontera en aquellos años de carestía. De este modo, la Guardia Civil lo tenía como una zona de paso clave; dedicada a impedir la entrada de productos de estraperlo en las fronteras españolas. Una vez fueron abolidas las fronteras entre los países de la Unión Europea perdió importancia para ganar en belleza, hasta convertirse en lo que es hoy; un pasaje con unas vistas espectaculares.
Es evidente que resulta imposible visitar Lloret de Mar, y no perderse en los muchos rincones que abarca el Camino de Ronda; dando un paseo que, para muchos, en ocasiones merece varias horas de duración, y hacerlo con una parada obligatoria: la Dona Marinera. Esperamos que sus deseos se cumplan.
